Abrigo de vestir

3 de agosto de 2022

Perfección pura en el balance entre elegancia y coolness.Melodie Jeng via Getty Images

Un abrigo de vestir —también conocido como overcoat o abrigo business— es uno de esos básicos que terminan por alcanzarte tarde o temprano. Y está bien. Estamos hablando de una prenda hiperclásica e insustituible en el armario de todo hombre. No importa a qué te dediques o si no usas traje a diario; las ventajas de sofisticación y presencia son enormes. Sin embargo, con su uso se despiertan grandes dudas sobre nuestro estilo, las cuales son muy propias de nuestra época: cómo hacer para vestirlo sin que esto se traduzca en outfits aburridos ni una seriedad que ocasione nada más que bostezos, te estarás preguntado.

Lo cual es muy válido. Todo lo que cruce la línea de unos jeans, unos tenis y una chaqueta estilo bomber, acercándose gravemente a diseños más clásicos, suele darnos la impresión de que sería un estilo favorito entre nuestros padres, abuelos o algún personaje de Mad Men o Downton Abbey. Y tal vez sí. Pero eso no quiere decir que no podamos incorporar una prenda de esta naturaleza a nuestro moderno guardarropa ni que se vean mal. Todo lo contrario. Dejará muy en claro que sabemos de moda y que, además de todo, tenemos el gusto y la creatividad para hacerla propia.

A fin de cuentas, los clásicos son clásicos por algo, y no podemos ignorarles.

Y podrías estar pensando para qué quieres un overcoat, pero la verdad es que todos necesitamos de uno. Independientemente de su gran poder para completar outfits profesionales y de tinte formal para importantes eventos, este abrigo es fabuloso porque en cuestión de segundos —así lo lleves con jeans y playera— te hace ver mucho más arreglado, misterioso, estilizado y hasta sexy. No importa la edad que tengas. Pero déjanos que te contemos más al respecto.

Un overcoat es un tipo de abrigo formal o semiformal —que nosotros hemos dado en llamar “de vestir”—, y que se extiende más allá de la cintura pero apenas sobrepasa el punto de las rodillas. Su nombre en inglés, overcoat, se debe a que es un abrigo que está diseñado para usarse sobre el atuendo entero. Incluso, bien podríamos traducirlo como abrigo superior, de encima o incluso puedes encontrarlo como sobretodo. 

Algo que debemos destacar en especial es que estos abrigos de vestir son atractivos, cómodos y fáciles de mantener. De allí nuestro total enamoramiento. Y como lo dijimos, los overcoats están diseñados para usarse como la prenda más externa de todo un outfit; esto significa que, de así quererlo, puedes llevarlo encima de un saco, una chaqueta o un chaleco también. Es muy común que éste sea la solución contra el frío al usar un traje, por ejemplo. Y lo que sucede es que su construcción es tan amplia que tiene suficiente espacio al interior como para no competir con el volumen de otras prendas o hacerte sentir incómodo con unas estructuradas hombreras extra.

La mayoría de los abrigos de vestir también cuentan con una construcción gruesa y, por lo general, están hechos de lana de alta calidad o tweed. ¿Lo mejor? Esta confección les hace excepcionalmente cálidos y más que perfectos para la llegada del otoño y las fiestas de invierno.

Además, cosa que nos encanta, es un trocito de historia en nuestros armarios. El abrigo de vestir ha sido una pieza clave en el guardarropa de un hombre desde que se inventó a fines del siglo XVIII. ¿Sus cambios? De los más sutiles en la historia de la moda.